sábado, 2 de agosto de 2014

Escribirle un libro al escritor

Alguien debería escribirle un libro al escritor, por lo menos para que sienta que lo estiman, así como el coronel jamas recibió su carta y mis putas tristes me hicieron perder toda una vida y yo te extraño Gabriel.
Perdí a mi esposa y a la que le siguió, perdí un hijo y el que venia en camino, sinceramente la atmósfera se tornaba gris y somnolienta y llego la tercera linea de color que desgraciadamente se desvaneció antes del canto de las aves en la madrugada.
Tuve la tentación de tocarla y la mala manía de molerla para ver los tonos que no había vislumbrado. Pero era extraña y voluble, venia con un manual de instrucciones y como buen hombre jamas me dedique a leerlas.

Rezaban:
- No se le caliente a mas de 30 grados
- No se le mueva de su lugar
- Por lo que mas quiera no altere su ritmo de vida
- Mantengala estable ya que si se desvanece no podrá repararla
- Evite ser brusco y dele mucho cariño
- Mantengala fresca, se acalora facilmente
- Obedezca sus ordenes
- Tranquilicela si se siente triste

Inconcientemente cumpli con varias reglas, pero en el fondo yo veia que se atenuaba, pense: sera mi imaginación. Pero tarde me di cuenta que solo bastaba tocarla una vez mas para que desapareciera y así fue.
Una mañana la toque con la mera intención de saber si duraría, si en verdad había cumplido todos los requisitos que necesita una linea, para ver si en verdad no estaba atenuada y sonrió antes de decirme adiós.

Me senté triste en el pasto nuevamente gris y trate de recordar como se veía mi casa gris, pero aun recordaba el color y no podia ni queria volver a la vida gris, busque por todos lados hasta que encontre la raiz de la linea y la plante y cuide con mucho cariño, segui las instrucciones por primera vez en mi vida y pude ver el color a traves de la pequeña raiz.
Pude darme cuenta entonces que a las lineas no les importa quien las cuide, si no siguen las instruciones se mueren.

Vuelta a casa me di cuenta que esa raiz estaba formada de mi, no era la raiz de aquella linea, era una raiz de una linea saliendo por los dedos de mis pies.

Regrese a plantarla, y espero fervientemente que crezca y se convierta en una esfera y no necesite de mas lineas para poder ver el color.

Cuentan en las noches, en los bares, lugares que suelo frecuentar, que a las mujeres no les interesa nadie y que son incapaces de amar. Son palabras de los rendidos en el campo de batalla, las guerras cobran vidas y dejan cicatrices, yo ya tengo 28 de ellas y quiero seguir. Jamas olvido las cosas bellas y a las lineas que se desvanecieron. Jamas dire que las mujeres nacen sin corazón. Pero en algo estoy de acuerdo, algunas son tan cobardes que ocultan sus sentimientos y se vuelven frias y volubles y dejan de hacer la guerra. Sencillamente se van y duermen tranquilas, sin extrañarte, sin pensar en que hubiese pasado, no lloran por la noche hasta quedarse dormidas, no piensan en llamarte para reparar las cosas. Y mi abuela decia muy sabiamente: los matrimonios de ahora fracasan porque la gente no sabe que si algo se rompe, se arregla. Yo soy humano y se que rompere cosas mientras aprendo, no entiendo porque porque porque nadie quiere ayudarme a repararlas y sencillamente se dedican a decir: buscate otra mejor.

Por eso deberian escribirle un libro al escritor, porque esta tan triste, tan dolido, tan solo en ese suelo gris pensando en si aun existe un tal vez...


#ComoChocolateAmargo

By Antonio Amaya

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